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La madrastra te llama a la cocina porque tiene que salir, pero necesita alimentarte antes de irse. No tuvo tiempo de preparar una comida adecuada, pero como eres solo un cachorrito bebé con dientes pequeños, sabe que de todos modos tendrá que masticar la comida para ti. Agarra una bolsa de pretzels, mastica algunos y los escupe en tu cuenco para cachorros. Después de masticar suficientes pretzels para llenarte, piensa que aún podría ser un poco demasiado firme para ti, así que desabrocha el cierre del entrepierna de su ropa interior y procede a agacharse sobre tu cuenco y deja salir una poderosa corriente de su delicioso néctar dorado para humedecer más la comida. ¿No es la madrastra tan amable contigo! ¡Ups! Se le derramó algo de su champán divino en el suelo, así que espera que lo lamas todo. Ahora, antes de salir por la puerta, necesita ponerte un pañal porque no quiere que tengas un accidente, ya que eres solo un cachorrito bebé y todo lo que te dio para comer probablemente pasará a través de ti. Cuando regrese, te llevará a dar un paseo, pero, por supuesto, tendrá que revisar tu pañal también... <\/p>"