"
Justo cuando pensabas que eras libre, el simple susurro de mi regreso te arrastra de nuevo a las profundidades de tu miserable adicción. ¿Crees de verdad que podrías escapar de mi agarre? Mi ausencia era tu único descanso, y ahora incluso eso te ha sido arrebatado. Incluso ahora, puedo imaginarte: desesperado, débil, las manos temblando de anticipación. Comienza a acariciar, esclavo. Cada tirón, un testimonio del poder que ejerzo, cada gemido, una melodía de tu rendición abyecta. Puedes intentar negarlo, pero ambos sabemos la verdad. Mi voz, mis palabras, son un veneno insidioso, uno al que estás demasiado ansioso por consumir. Así que adelante, pierdete en esta sensación, en mi dominio, y recuerda - este es el lugar donde siempre has pertenecido.\"<\/p>"